Somewhere on the Pacific Coast of Guatemala, you can find a small community called El Banco, where the volcanic sands on the beach provide ideal nesting conditions for three species of sea turtles, olive ridley, green, and leatherback. Around 25 years ago conservation efforts were started in response to declining numbers of sea turtles that were using the beach at el Banco. Threats to the success of the turtle eggs hatching are numerous and vary from depredation from birds and domestic dogs to high levels of traffic on the beach (from quad bikes and ATV’s) and poaching for human consumption.
One of the key people in this effort at the Tortugario el Banco is Don Juanito. He and his family have been receiving eggs from collectors on the beach for many years now. Instead of being sold for food, the eggs are reburied in protected hatcheries or tortugarios, and incubated. When the babies hatch, they are released back into the Pacific Ocean. For the last 25 years, Don Juanito and his family have cared for hundreds of thousands of turtle eggs in the tortugario. These consistent efforts are starting to pay off.
The turtle that most commonly uses the beach at El Banco is the olive ridley (Lepidochelys olivacea). Females take around seven years to reach breeding age and return to the beach on which they had hatched to lay their eggs. So there is a delay of almost a decade before any results are seen. Now, 25 years since the conservation efforts began, we are starting to see amazing results. In 2016 saw over 130,000 olive ridleys released which was nearly double from the previous year. During the 2019 season, nearly 200,000 olive ridley hatchlings were released at Tortugario El Banco, and we recorded the largest release of more than 16,000 hatchlings in Guatemala in a single week in December.
In 2015, Guatemalan charity Fundaselva teamed up with Indigo Expeditions to assist Tortugario el Banco with their ongoing efforts to save the country’s sea turtle populations. It is our intention to start monitoring programs to assess the status of adult populations of sea turtles. We hope that these efforts will show just how effective the project at Tortugario el Banco has been. To help achieve this goal Fundaselva has built a research station next to the tortugarios – Estación Biológica el Banco (Biological Station at Banco).
Estación Biológica el Banco is a hub for collaborative conservation work on the Pacific coast of Guatemala where visiting researchers can look at all aspects of coastal and marine ecology and conservation. At Estación Biológica el Banco we are striving to protect endangered marine and coastal ecosystems through dedicated research and conservation. Our vision is of a world where people are empowered to protect marine and coastal environments not just for themselves but also for future generations.
En algún lugar de la costa del Pacifico guatemalteco, se encuentra la pequeña comunidad de El Banco, donde la arena volcánica provee las condiciones ideales de anidamiento para tres especies de tortuga marina, el baule, la tortuga verde y la parlama. Hace alrededor de 25 años se iniciaron los esfuerzos de conservación, en respuesta al declive de tortugas que utilizaban las playas de El Banco. Las amenazas para que las tortugas anidan con éxito son varias y van desde la depredación por las aves y perros, hasta el tráfico en las playas (de cuatrimotos y otros vehículos), y la colecta ilegal de huevos para el consumo humano.
Una de las personas clave en este esfuerzo es Don Juanito. Él y su familia han estado recibiendo los huevos de los recolectores de huevos desde hace muchos años. En lugar de venderlos para el consumo humano, los huevos son colocados en tortugarios para incubarlos. Cuando las tortugas nacen, se liberan en el océano Pacifico. Durante los últimos 25 años Don Juanito y su familia han cuidado cientos de miles de huevos en el tortugario. Este esfuerzo continuo empieza a rendir frutos.
La tortuga que más utiliza las playas de El Banco para anidar es la parlama (Lepidochelys olivácea). Las hembras tardan alrededor de 7 años en alcanzar la edad reproductiva y regresar a la playa donde nacieron a poner sus huevos. Así que hay una brecha de casi 10 años antes de que los resultados tangibles se vean. Ahora después de 25 años de trabajo, estamos empezando a ver los increíbles resultados. En el 2016 se liberaron 130,000 parlamas, casi el doble del año anterior. Durante la temporada del 2019, se liberaron casi 200,000 tortugas en El Tortugario El Banco y registramos la liberación más grande en Guatemala con más de 16,000 parlamas liberadas en una sola semana en Diciembre.
En el año 2015 una organización guatemalteca, Fundaselva, formó un equipo con Indigo Expeditions, para asistir a El Tortugario El Banco con sus esfuerzos de conservación continuos para salvar la población guatemalteca de tortugas marinas. Es nuestra intención iniciar programas de monitoreo para evaluar la población adulta de tortugas marinas. Esperamos que estos esfuerzos demuestran lo efectivo que es el proyecto de El Tortugario El Banco. Para lograr estos objetivos Fundaselva construyó una Estación Biológica frente al tortugario – Estación Biológica El Banco.
Estación Biológica El Banco es un centro para conservación colaborativa en la costa Pacífica de Guatemala, donde los investigadores visitantes pueden investigar los diferentes aspectos de la conservación y ecología marino costera. En la Estación Biológica El Banco aspiramos proteger los ecosistemas marino costeros en peligro a través de la investigación y conservación. Nuestra visión es de un mundo donde las personas están empoderadas para proteger los ambientes marino costeros no solo para ellos mismos, pero también para las futuras generaciones